Cucharilla, servía para hacer gotear pez hirviendo en las orejas y nariz de la víctima.
Muchas señoras de lo que hoy llamaríamos «high society» de la época, usaban melindrosamente este objeto durante sus «cocktail parties» o «five o’c1ock teas» de la época, para echar azúcar o similares. Era considerado como un signo de extremado refinamiento.